Un jabón especialmente interesante por la combinación de
estos dos ingredientes, arcilla rosa y árbol de té, que aportan a la piel protección
al tiempo que la depuran.
El aceite esencial de árbol de té tiene variados y útiles
usos. Es bactericida, cicatrizante, antiinflamatorio, desodorante y balsámico,
destacando, en el caso de este jabón, el efecto anti-acnéico al ser un
excelente desinfectante, que unido a las propiedades de la arcilla van a
oxigenar y regenerar la piel. Lo aconsejo para las que vais a gimnasios,
piscinas o cualquier lugar público expuesto a infecciones (hongos en las uñas
–micosis-, herpes labiales, conjuntivitis, infección vaginal, etc.)
En el cabello este aceite, además de regular la actividad de
las glándulas sebáceas, previene y combate el hongo que provoca la caspa.
Con unas gotas de aceite esencial en un algodón
empapado en agua, aplicado sobre los granitos, y un poco de constancia,
conseguiréis cicatrizarlos sin resecar la piel. Como veis es bastante
socorrido.
Su nota aromática es alta-media; volátil, etéreo y con carácter,
me trae recuerdos del olor de las boticas.
El jabón lleva aceite de oliva macerado con rosas, argán, coco, ricino, karité y cera virgen.
Las propiedades de la arcilla las podéis ver en estas entradas:
http://www.jabonesrositalancellotti.com/2012/12/jabon-natural-de-tres-arcillas.html
http://www.jabonesrositalancellotti.com/2012/04/jabon-natural-de-arcilla-roja.html